• Un servicio de asistencia telefónica de 24 horas recibirá avisos de posibles daños durante la obra
• Los técnicos visitarán 440 edificios entre Mandri y la Diagonal bajo los que pasará la tuneladora
- Obras de la L-9 en Doctor Marañón, antes de la Diagonal, ayer. Foto: JOAN PUIG
RAMON COMORERA
BARCELONA
Sin prisa pero sin pausa. O al menos solo con las demoras inevitables, aunque a veces muy notorias, por incidencias subterráneas o razones presupuestarias. Este parece ser ahora el ritmo de obras de la mastodóntica L-9 del metro a tenor de la última sucesión de licitaciones. Muchas son del atrasado y comprometido tramo central que pasará bajo miles de viviendas entre la Meridiana y la Diagonal. La excavación con dos tuneladoras empezará en el 2010 y ahora se ponen en marcha ya las inspecciones previas sobre el estado de los edificios. En el Guinardó, al este, el proceso empezó en septiembre como informó este diario. Ahora toca al oeste, Sarrià, donde la irrupción de la L-9 obligará a revisar un total de 4.650 viviendas.BARCELONA
Entre las futuras estaciones de Zona Universitària y Mandri se inspeccionarán un conjunto de 440 edificios situados en la franja de 180 metros de ancho (90 a cada lado del túnel) que los técnicos consideran de riesgo. Esta radiografía previa de los inmuebles será una garantía para los vecinos ante posibles daños causados por las obras. A la Conselleria d’Obres Públiques le servirá, en cambio, para curarse en salud frente a reclamaciones infundadas.
El sector Diagonal-Mandri, estación esta última convertida en divisoria de aguas porque allí estará el pozo de salida de las máquinas que lo excavarán desde los extremos, se ha dividido en dos partes en el plan de inspecciones que se adjudicará en febrero. La primera va de Zona Universitària a Manuel Girona pasando por Campus Nord. Aquí las visitas y la confección de los informes, que se depositarán en el Col.legi de Notaris de Catalunya, durarán cuatro meses, costarán 0,4 millones y abarcarán 841 viviendas y 106 edificios.
INVENTARIO CON FOTOS / La segunda discurre de Manuel Girona a Mandri con las paradas intermedias de Prat de la Riba y Sarrià, donde la línea se cruzará con la de FGC. Esta es una zona mucho más extensa que se cubrirá en nueve meses y con 1,33 millones para 3.811 pisos y 334 inmuebles. Los equipos de inspección harán un inventario con fotos de los daños y de su intensidad y valor.
El contrato de estas revisiones incluye un punto destacado: un servicio de asistencia técnica telefónica permanente, las 24 horas todos los días de la semana, con un experto que recibirá los avisos sobre posibles grietas u otros daños causados en la traza del túnel. Este profesional de guardia visitará la vivienda y hará de inmediato un informe de la incidencia «definiendo la relación de obras y daños». El dispositivo se prevé inicialmente para un periodo de 201 días, el tiempo que debería durar la excavación.
AVANCE DE LOS TOPOS / La tuneladora que se está adaptando junto a la plaza de las Havaneres (Meridiana) para excavar el terreno duro del tramo central por Maragall, Guinardó, Lesseps y hasta Mandri podría empezar su ruta a principios del 2010, según el director de Geologia i Obres Subterrànies, Jordi Jubany. El topo que hará el sector opuesto podría llegar a la Diagonal desde la Torrasssa, donde avanza ahora, el próximo verano y reiniciar su marcha en el 2011 hacia Mandri una vez revisado y adaptado. El tramo central de la L-9 debe ser el último en abrirse en el 2014. El primero será el de Santa Coloma en las próximas semanas.
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