Tras un problema de filtración de agua, cuyo origen ya resolvimos, vamos a eliminar la mancha de humedad que ha quedado en esta pared de hormigón que tenemos en el sótano.
Paso a paso
1
Comenzaremos el trabajo protegiendo con plástico las zonas que están alrededor de la superficie dañada.
2
Una vez cubierta la parte inferior del marco de la ventana, eliminamos la pintura, eflorescencias de salitre y material en mal estado, con una esponja humedecida en lejía con la que frotaremos enérgicamente.
3
Cuando la superficie se haya secado, pasamos suavemente una lija de grano fino y retiramos el polvo con un paño o papel.
4
Lo siguiente que haremos será aplicar un tratamiento contra la humedad y el salitre. Para eso, primero tendremos que preparar el producto diluyéndolo en agua, en las proporciones que nos indica el fabricante.
5
Con una paletina, aplicamos el producto en la zona dañada. Daremos dos capas sucesivas, húmedo sobre húmedo, hasta la saturación del soporte. Entre los distintos tratamientos que podemos encontrar en el mercado, nos hemos decantado por un producto preventivo anti-humedad para soportes porosos. Para realizar esta tarea con limpieza, nos protegemos las manos con unos guantes de látex.
6
Transcurrido el tiempo de secado, aplicaremos el revestimiento final, en nuestro caso, la misma pintura que tenemos dada en la pared y que aplicaremos con una brocha plana en la zona de unión de la pared con el marco de la ventana.
7
Después, cubrimos el resto de la superficie con un rodillo de pelo corto.
8
Finalmente, retiramos el plástico protector y la cinta de carrocero, antes de que el producto se seque.
9
De esta manera tan sencilla, ya tenemos la mancha de la pared totalmente eliminada. Además, siguiendo las nociones que os hemos dado a lo largo de este briconsejo, obtendréis un acabado perfecto.
Paso a paso
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Comenzaremos el trabajo protegiendo con plástico las zonas que están alrededor de la superficie dañada.
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Una vez cubierta la parte inferior del marco de la ventana, eliminamos la pintura, eflorescencias de salitre y material en mal estado, con una esponja humedecida en lejía con la que frotaremos enérgicamente.
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Cuando la superficie se haya secado, pasamos suavemente una lija de grano fino y retiramos el polvo con un paño o papel.
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Lo siguiente que haremos será aplicar un tratamiento contra la humedad y el salitre. Para eso, primero tendremos que preparar el producto diluyéndolo en agua, en las proporciones que nos indica el fabricante.
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Con una paletina, aplicamos el producto en la zona dañada. Daremos dos capas sucesivas, húmedo sobre húmedo, hasta la saturación del soporte. Entre los distintos tratamientos que podemos encontrar en el mercado, nos hemos decantado por un producto preventivo anti-humedad para soportes porosos. Para realizar esta tarea con limpieza, nos protegemos las manos con unos guantes de látex.
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Transcurrido el tiempo de secado, aplicaremos el revestimiento final, en nuestro caso, la misma pintura que tenemos dada en la pared y que aplicaremos con una brocha plana en la zona de unión de la pared con el marco de la ventana.
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Después, cubrimos el resto de la superficie con un rodillo de pelo corto.
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Finalmente, retiramos el plástico protector y la cinta de carrocero, antes de que el producto se seque.
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De esta manera tan sencilla, ya tenemos la mancha de la pared totalmente eliminada. Además, siguiendo las nociones que os hemos dado a lo largo de este briconsejo, obtendréis un acabado perfecto.
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