Debido al uso, uno de los desperfectos más comunes en un mueble de cocina es que se deteriore la cavidad que acoge la cazoleta de la bisagra. En este Briconsejo veremos cómo solucionarlo utilizando una masilla reparadora.
Paso a paso
1
Lo primero que tendremos que hacer es soltar y retirar la puerta del armario y colocarla sobre la mesa de trabajo. Antes de proceder con la reparación limpiaremos bien el hueco de posibles restos de polvo o madera. Para realizar esta tarea utilizaremos un pincel.
2
Cortamos un trozo de masilla reparadora y lo trabajamos con las manos hasta que sus dos componentes queden bien mezclados.
3
Con el producto ya preparado reconstruimos los trozos que faltan en la cavidad en la que se aloja la bisagra.
4
El siguiente paso consistirá en retirar el exceso de masilla. En esta ocasión utilizaremos un cortante.
5
Dejamos endurecer el producto y repasamos suavemente la zona reparada con una lija de mano de grano fino para que el acabado sea perfecto.
6
A continuación, pintamos la superficie del mismo color que el resto de la puerta. Como la superficie sobre la que vamos a trabajar es lisa emplearemos un rodillo de espuma.
7
Presentamos la bisagra de cazoleta en su posición y hacemos unos agujeros guía con una broca fina para madera. Después, fijamos la bisagra con unos tirafondos.
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Ahora ya podemos colocar de nuevo la puerta en el armario. Con esta sencilla reparación tendremos la seguridad de que la bisagra quedará perfectamente sujeta.
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