Los usuarios de Renfe de Girona dan marcha atrás en su protesta

Las discrepancias en el grupo anulan un nuevo corte de las vías en BCN

Varios agentes custodian las vías de Passeig de Gràcia, ayer. Foto: ricard cugat

CRISTINA BUESA
BARCELONA

La plataforma de usuarios de la línea Figueres–Girona–Barcelona se arrepintió ayer en el último momento de su intención de interrumpir el servicio ferroviario en Passeig de Gràcia. Las discrepancias en el seno del grupo llevaron a que solo una quincena de miembros de ese grupo viajasen en el tren desde el que tenían que bajar y cortar las vías, a las 7.48 horas. No obstante, un nutrido grupo de Mossos les esperaba en el andén para impedírselo.
La decisión de la plataforma, que en marzo ya cortó la circulación en Sant Celoni (Vallès Oriental) con el mismo objetivo de denunciar el mal servicio que reciben, solo obtuvo el respaldo de unas 30 personas en la última asamblea. Este escaso apoyo y la mala difusión de la convocatoria llevaron al fracaso de ayer. Esto comportará, según confesó un activo miembro del grupo, que se replantee el papel que juega la plataforma, que negocia con Renfe desde hace más de seis meses.
La compañía reiteró ayer su voluntad de diálogo ya que en este tiempo han acercado posturas en varios aspectos, como la devolución de parte del billete si hay retrasos.