Piden un referéndum para votar esta medida porque puede suponer la pérdida de puestos de trabajo
La Asociación Empresarial del Taxi de Valencia, entidad que agrupa a las empresas que explotan varias licencias, se ha posicionado en contra de la ampliación de los descansos en el Área de Prestación Conjunta de Valencia y pide un referéndum para dilucidar el tema. Cree que ese aumento de los descansos puede agravar su crisis particular y obligarles a despedir trabajadores.
La Mesa del Taxi reunida el pasado 12 de mayo aprobó, a iniciativa de las dos grandes asociaciones de taxistas de Valencia, incrementar en diez horas el día de descanso de entre semana y mantener el de los fines de semana. De esta manera pretenden retirar unos 500 coches de las calles y afrontar mejor la crisis, que ha reducido la actividad del sector en un 40%.
El problema es que esa medida perjudica, al parecer, a las empresas que gestionan varias licencias y tienen trabajadores llevando los coches por turnos. Según el presidente de la Asociación Empresarial del Taxi de Valencia, Carmelo Pardo, sólo en el área de Valencia (la capital y 32 municipios de la periferia) hay doscientas de estas empresas, que agrupan 450 licencias y dan trabajo a 800 personas.
En la actualidad, afirma, cada trabajador ha bajado su recaudación de 130 a 90 euros de media, lo que resulta casi "insostenible económicamente" para el empresario. "Nos están salvando días como los de la Copa del Rey, pero estamos muy al límite", dice.
Peligran los empleos
Si se amplían los descansos obligatorios, continúa, "entonces la ruina será total", porque "tenemos los coches doblados, con dos turnos al día, y si no podemos salir a la calle no será rentable el servicio, habrá que despedir trabajadores".
Su propuesta, por tanto, es que se mantengan los cinco días completos de servicio y dos de parada obligatoria, una medida que en su día ya les creó muchos problemas pero que han podido solventar con el tiempo. Y como en la Mesa del Taxi son minoría y no pueden sacar adelante ninguna de sus propuestas, piden un referéndum en el sector para que sean los propios taxistas los que decidan si están de acuerdo con la ampliación de los descansos.
Indefensión ante
los autónomos
El Área de Prestación Conjunta de Valencia, que abarca a la capital y a 32 municipios de su entorno, tiene en la actualidad unas 2.800 licencias, la mayoría de ellas en manos de autónomos. Las empresas sólo acumulan 450 de esos permisos. Eso hace que en la Mesa del Taxi, las dos grandes asociaciones de autónomos tengan todo el poder de decisión. La Asociación Gremial tienen 9 votos y la Federación Sindical del Taxi 4, mientras que USO tiene un voto y la Asociación Empresarial del Taxi de la Comunitat Valenciana otro voto. Para estos últimos, por tanto, su situación es de absoluta indefensión. Sólo en ocasiones han contado con el apoyo de la Gremial, que también agrupa a algunas empresas, pero siempre ha predominado la posición de la mayoría. Además, la Federación Sindical del Taxi se ha revelado como una entidad muy combativa capaz de movilizar a cientos de taxistas y ejercer una fuerte presión.
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