Los agentes les confiscaron 36 sprays de pintura y la tarjeta de
memoria de una cámara fotográfica que contenía imágenes de ellos pintando en el metro.
La Guardia Urbana de Barcelona detuvo el viernes a cinco jóvenes —un sexto menor de edad fue entregado a sus padres— por inutilizar las cámaras de video-vigilancia con pintura y hacer grafitis en el metro, en la parada de Trinitat Nova, Nou Barris. Los agentes han denunciado a los cinco jóvenes penal y administrativamente por una falta contra el patrimonio y por vulnerar la ordenanza de convivencia ciudadana municipal, lo que puede conllevar multas de más de 1.000 euros, según informa la policía municipal.
La detención se produjo cuando unos agentes que patrullaban de paisano vieron a seis jóvenes con bolsas que manipulaban la trampilla de una salida de emergencia de la línea 3 de metro. En ver que habían sido descubiertos, los jóvenes entraron por la trampilla y se escondieron en las vías del metro. Cuando los agentes intentaron detenerles a través de las vías, los jóvenes salieron corriendo por la puerta de emergencia por donde se habían colado y fueron interceptados por los agentes de paisano. Uno de ellos logró escapar.
Tras la detención, los agentes les confiscaron 36 sprays de pintura y la tarjeta de memoria de una cámara fotográfica que contenía imágenes de ellos pintando en el metro. Los agentes, con la ayuda del Jefe de Estación, revisaron las instalaciones y descubrieron que los jóvenes habían roto el mecanismo de entrada de la puerta de emergencia y que habían realizado pintadas. El Jefe de Estación reconoció a uno de los detenidos como el responsable de unas pintadas que se habían producido dos días antes de estos hechos contra seis cámaras de video-vigilancia del metro, para inutilizarlas.
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