CARLOS MÁRQUEZ DANIEL
Este joven taxista de 28 años lleva tres en el sector, suficiente tiempo, experiencia y kilómetros como para saber que la ciudad es imprevisible. Espera cliente en una parada provisional en el cruce de Mallorca con Sardenya –detrás de un muro que les esconde de los posibles viajeros, denuncia un compañero– y comenta que nunca ningún representante del poder público, ya sea del ayuntamiento o del Instituto Metropolitano del Taxi (IMT), les da información sobre las obras que se llevan a cabo en la ciudad. «Muchas veces te viene de sorpresa, estás conduciendo y ¡pum!, una calle cortada que te deja fatal ante la persona que llevas detrás», explica.Javier se entera de las obras gracias a la prensa, gracias a EL PERIÓDICO, concreta con gentileza. Dice que el barrio en el que tiene más problemas es Poblenou, «donde cambian el sentido de las calles cuando les da la gana». El concejal de Urbanismo, Ramon García-Bragado, reconoce la necesidad de «establecer medidas especiales de información para que los taxistas puedan saber qué calles están afectadas» y asegura que el ayuntamiento «está en conversaciones con el IMT» para tratar el tema.
Las obras de la pantalla del AVE en la Sagrada Família deben acabar antes de que la tuneladora llegue allí el próximo año. El pozo de Padilla seguirá abierto mientras se excave el túnel.
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