Estaba previsto para 2010 pero la Ciudad confirmó que se aplicará a mediados de diciembre. La bajada de bandera pasa de $ 3,80 a $ 4,60 y la ficha, de 38 a 46 centavos. Es la 9ª suba desde 2003.
Por: Nora SánchezA mediados de diciembre, los taxis aumentarán un 21%. La ficha pasará de $ 0,38 a $ 0,46 y la bajada de bandera, a $ 4,60. Ayer el proyecto fue debatido en audiencia pública, requisito indispensable para concretar aumentos de servicios públicos en la Ciudad. Las agrupaciones de taxistas reclamaron una suba del 30%, pero como la audiencia no es vinculante, se impondrán los valores fijados por el Gobierno porteño. La suba ya estaba prevista, pero para los primeros días de 2010. Al adelantar la fecha, los taxistas tendrán la nueva tarifa para una quincena en la que suele levantar el trabajo y, de alguna manera, compensa la demora burocrática en aplicar el aumento, uno de los principales reclamos escuchados en la audiencia.
Fue en el teatro Regio, donde los azulejos, despensas y mesadas de la escenografía de la obra "La cocina" sirvieron de marco para discutir el noveno aumento de los taxis desde 2003. Los protagonistas fueron funcionarios y taxistas, pero nadie representó a los usuarios. Entre el público, no había más de 35 personas.
El coordinador de licencias de taxis de la Dirección de Transporte, Jorge Matanic, justificó: "Cuando se calculó el aumento de 2008, del 22,58%, el retorno de la inversión era del 20,1%. En agosto bajó al 10,75%. Con la nueva suba, rondaría los 14,34%, algo razonable, porque le agrega un plus al 11% que daría la inversión financiera de esos activos". Un taxista le recriminó: "Se olvida de que entre el 11% de interés que da tener la plata en un banco y el 14,34% de rentabilidad del taxi, está el chofer".
Los taxistas pedían el 30% de suba. "Igual aceptamos el 21%", aclaró Luis Fernández, de la Asociación de Taxistas de Capital (ATC). Superado el trámite burocrático, el Ente emitirá ahora un informe para que, finalmente, el Ejecutivo saque el decreto. "Cuando terminemos, ya vamos a tener que discutir el próximo aumento", se quejó Fernández.
Sólo hablaron dos de los nueve anotados en la audiencia. Uno leyó un comunicado en nombre de ATC, la Sociedad de Propietarios de Automóviles con Taxímetro, la Unión de Propietarios de Autos Taxis, el Sindicato de Conductores de Taxis y el de Peones de Taxis, reclamando agilizar el procedimiento para las subas. Y recordaron que desde el último incremento, en junio de 2008, el valor de los autos fue subiendo entre un 2% y un 4% por mes y los repuestos aumentaron un 40%.
El otro orador fue el taxista José Luis Baldini, que explicó: "Cuando el costo de prestar el servicio se acerca cada vez más al costo que el servicio le cuesta al pasajero, es difícil sostenerse. La diferencia se compensa con más horas de trabajo arriba del taxi".
El subsecretario de Transporte porteño, Guillermo Dietrich confirmó: "El aumento arranca a mediados de diciembre". Cada ficha cae cada 200 metros o después de un minuto de espera, y la bajada de bandera son diez fichas. Desde que se descongeló la tarifa, en 2003, los taxis acumulan un aumento del 228%. "Es una locura subir en estos tiempos -reflexionó el taxista Hugo Calderón-. Ya con el anterior hay gente que jamás se volvió a subir a un taxi".
Fue en el teatro Regio, donde los azulejos, despensas y mesadas de la escenografía de la obra "La cocina" sirvieron de marco para discutir el noveno aumento de los taxis desde 2003. Los protagonistas fueron funcionarios y taxistas, pero nadie representó a los usuarios. Entre el público, no había más de 35 personas.
El coordinador de licencias de taxis de la Dirección de Transporte, Jorge Matanic, justificó: "Cuando se calculó el aumento de 2008, del 22,58%, el retorno de la inversión era del 20,1%. En agosto bajó al 10,75%. Con la nueva suba, rondaría los 14,34%, algo razonable, porque le agrega un plus al 11% que daría la inversión financiera de esos activos". Un taxista le recriminó: "Se olvida de que entre el 11% de interés que da tener la plata en un banco y el 14,34% de rentabilidad del taxi, está el chofer".
Los taxistas pedían el 30% de suba. "Igual aceptamos el 21%", aclaró Luis Fernández, de la Asociación de Taxistas de Capital (ATC). Superado el trámite burocrático, el Ente emitirá ahora un informe para que, finalmente, el Ejecutivo saque el decreto. "Cuando terminemos, ya vamos a tener que discutir el próximo aumento", se quejó Fernández.
Sólo hablaron dos de los nueve anotados en la audiencia. Uno leyó un comunicado en nombre de ATC, la Sociedad de Propietarios de Automóviles con Taxímetro, la Unión de Propietarios de Autos Taxis, el Sindicato de Conductores de Taxis y el de Peones de Taxis, reclamando agilizar el procedimiento para las subas. Y recordaron que desde el último incremento, en junio de 2008, el valor de los autos fue subiendo entre un 2% y un 4% por mes y los repuestos aumentaron un 40%.
El otro orador fue el taxista José Luis Baldini, que explicó: "Cuando el costo de prestar el servicio se acerca cada vez más al costo que el servicio le cuesta al pasajero, es difícil sostenerse. La diferencia se compensa con más horas de trabajo arriba del taxi".
El subsecretario de Transporte porteño, Guillermo Dietrich confirmó: "El aumento arranca a mediados de diciembre". Cada ficha cae cada 200 metros o después de un minuto de espera, y la bajada de bandera son diez fichas. Desde que se descongeló la tarifa, en 2003, los taxis acumulan un aumento del 228%. "Es una locura subir en estos tiempos -reflexionó el taxista Hugo Calderón-. Ya con el anterior hay gente que jamás se volvió a subir a un taxi".
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