El vehículo colisionó contra una farola y una marquesina en la calle Alvaro Flórez Estrada. Once de los heridos están leves y uno con pronóstico reservado
David GONZÁLEZUn susto mayúsculo que pudo haber acabado en tragedia. Doce personas sufrieron en la tarde de ayer heridas de diversa consideración al empotrarse un autobús de la línea 11 de TUA contra la marquesina de la parada de la calle Álvaro Flórez Estrada, en El Cristo, a la altura del Colegio Buenavista, y posteriormente derribar sobre el suelo una farola isabelina.
El conductor, con pronóstico reservado, perdió el conocimiento mientras conducía, por lo que el vehículo quedó sin control. El autobús iba a poca velocidad, lo que limitó las consecuencias del golpe. Los once heridos restantes, todos leves, eran pasajeros del autobús, que sufrieron golpes sin gran importancia. Afortunadamente, a la hora del accidente, poco antes de las cinco de la tarde, no se encontraba nadie en la marquesina ni transitaba ninguna persona en ese momento por la acera en la zona donde impactó la farola.
Los pasajeros heridos presentaban contusiones y heridas leves en la primera exploración que se les realizó en el mismo lugar del siniestro. Varios de ellos salieron del vehículo accidentado por su propio pie, y uno de ellos rechazó la atención médica. El resto de los lesionados fueron trasladados al cercano Hospital Central. Allí fue llevado también el conductor del autobús, tras ser atendido por una unidad de la uvi móvil. Fuentes de los servicios médicos de urgencias que se desplazaron al lugar del accidente indicaron que el desvanecimiento del chófer se habría debido a un «síncope suave». El hombre recuperó la consciencia poco después del siniestro.
El autobús de TUA sufrió daños en la luna frontal y en las defensas delanteras. Uno de los laterales de la marquesina de la parada quedó destrozado.
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