lunes, 18 de mayo de 2009
El metro capta 2,5 millones de viajeros con su horario nocturno
El Metro de Barcelona ha registrado en dos años 2,5 millones de validaciones durante los sábados por la noche, según datos de Transports Metropolitans de Barcelona (TMB). La cifra, que incluye las validaciones de entre las dos y las cinco de la madrugada de los domingos, se eleva a 2,6 millones si se considera el incremento de pasaje hasta las siete de la mañana, informa Europa Press.
La medida, que se inició el 14 de abril de 2007 para el Metro y las líneas urbanas de Ferrocarrils de la Generalitat (FGQ, ha tenido una buena acogida entre las asociaciones juveniles y el sector del ocio, subraya TMB en su revista Hora punta.
Según un estudio de la compañía y la Agència de Salut Pública de la capital catalana, desde que los transportes ferroviarios abren de noche se ha reducido sistemáticamente el número de lesionados en accidentes de tráfico. Los sábados se ha pasado de una media mensual de 45,2 lesionados a 32,9, un 28% menos.
La prolongación del horario del suburbano era inicialmente una iniciativa provisional para medio año, pero en octubre de 2007 el Govern decidió prorrogarla en vista del éxito de los primeros meses, ya que el Metro y las líneas urbanas de FGC registraron 2,2 millones de pasajeros, cuando la previsión era de 324.000.
TMB no prevé extender la iniciativa a más noches durante la semana por la necesidad de hacer mantenimiento de las infraestructuras con el servicio parado.
Nuevos trenes
Por otra parte, TMB ha encargado 50 trenes de la serie 9000, que circularán por las futuras líneas 9 y 10 del Metro, con puertas frontales de evacuación de emergencia en cada extremo de los convoyes. La innovación, que implementa Alstom en su factoría de Santa Perpètua de Mogoda (Barcelona), supone una novedad absoluta en el material móvil de los metros europeos. Según TMB, sólo los trenes del Metro automático de Singapur, también construidos por Alstom, incorporan el dispositivo.
Consiste en una plataforma de 1,24 metros de ancho, formada por láminas de kevlar-nomex recubiertas con tiras de neopreno y tiras de material abrasivo, para evitar resbalar, y que crean una lámina con superficie rígida que se despliega en menos de diez segundos con barandilla incluida. Su utilización se prevé únicamente cuando no sea posible recuperar el tren con los telemandos y no se pueda aproximar un segundo tren para remolcar al averiado. La rampa sólo se abrirá con el tren parado y previa autorización del centro de control.
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